El nuevo año escolar comenzó en la fecha establecida y todo estaba listo cuando para cuando los niños llegaran. Todos los proyectos, pequeños y grandes, estaban preparados para cualquier necesidad, fuese pequeña o grande.
 Para  el desahogo de la planta de tratamiento de agua local, tuvieron la idea de implementar unos “baños compostâ€. El objetivo de estos baños es que las necesidades ya no se filtra simplemente en el suelo, sino se recogen en un recipiente grande. Sin el suplemento de productos quÃmicos, pero con aserrÃn como complemento, el contenido se convertirá humus. Este humus puede ser utilizado como tierra y fertilizante para la huerta de la fundacín.
Mucho habÃa que hacer antes de que todo estuviera listo para los niños. HabÃa grandes contenedores y seis cabinas cementadas, de las cuales solo dos se encuentran regularmente en uso. Hemos forjado y pintado puertas de madera e improvisado unos baños hechos con macetas y cemento. El mayor problema era el suministro de oxÃgeno, ya que ninguna mosca debe infiltrarse! Asà que tuvimos que sellar todo cuidadosamente. En el primer dÃa de clases después de las largas vacaciones de verano, hicimos una introduccín para los niños. Pues la mayorÃa de los niños nunca  habÃan visto un baño tan especial. Los baños compost fué ​​el proyecto más grande en el que los voluntarios colaboraron con gran éxito.
Otro punto a destacar que se une a la cadena de logros, es el nuevo “diseño†del patio de la Fundacíon el cual terminamos justo a tiempo. El patio, en el que los niños juegan a menudo, nos hacÃa una impresín algo gris y poco animado, por lo que surgí la idea de una “redecoracínâ€. Asà que cogimos pincel y bote de pintura y le otorgamos un pequeño viaje a nuestra fantasÃa. En primer lugar, pintamos una rayuela. A partir de aquel momento todo se convirtí en un viaje hacia  nuestra propia infancia con el resultado de un “Twister” y una oruga gigante como “Juego de la oca” pintados en el suelo. Los juegos fueron inspeccionados el lunes con gran interés y alegrÃa por los niños. Desde entonces se escuchan saltos y risas provenientes de varios rincones del patio. Tal vez un poquito más que antes.
El inicio del nuevo año escolar fue positivo y con muchas cosas nuevas por descubrir.
Voluntaria Ailine Thiemann